Para quienes decidimos emprender, un ingrediente principal en nuestra receta es la pasión. La pasión que nos permite enfrentar la incertidumbre, los miedos, las negativas, las presiones, las conquistas, las glorias, las largas horas de trabajo, los éxitos y la necesidad de mantenernos motivados y con el bombillo de la creatividad e innovación encendido para crecer y permanecer vigentes en el mercado.
Sentir amor, pasión y entusiasmo por nuestro emprendimiento es fundamental, pero es necesario que no descuidemos ni por un instante los propósitos, objetivos, mecanismos y métodos que definen el rumbo que toda empresa debe seguir para alcanzar las metas fijadas, metas que significan el crecimiento y desarrollo tanto humano como económico.
Lo anterior yo lo traduzco en la pasión estratégica, que es el proceso de definición e implementación de acciones para alcanzar los objetivos y propósitos de la empresa, todo enmarcado en un ambiente de pasión, entusiasmo y motivación.
Preparar los propósitos, objetivos, estrategias, acciones, la misión, visión, la filosofía de una empresa y sus valores corporativos, no debe ser una tarea rutinaria ni obligatoria como requisito de cumplimiento para una certificación, soporte de una auditoría o cuadros con esta información que adornen nuestras oficinas principales. Todo lo contrario, planear con pasión es definir conjuntamente con tu equipo cómo visualizas tu empresa, qué quieres lograr, hacia dónde vas, en cuánto tiempo quieres estar ahí, con quién quieres recorrer ese camino y cuáles son los principios y valores que van a definir ese camino.
El equipo de trabajo que escojas para acompañarte es fundamental. Ellos deben estar alineados con los valores que para ti son claves en tu emprendimiento. Si prestar un servicio de calidad es para ti un valor prioritario, las personas que selecciones deben tener una marcada orientación al cliente. Si para ti el compromiso con la rentabilidad marca una cultura en tu nueva empresa, entonces el personal que selecciones debe estar ajustado a esta filosofía.
Si tu y tu equipo de trabajo están alineados con la misión, la visión y los valores organizacionales y se convierte en un estilo de vida para todos, el cumplimiento de los objetivos y metas corporativas, se viven con sentido de pertenencia, compromiso y responsabilidad.
No te apasiones con solo apasionarte. Acompaña ese extra de motivación y pasión con planeación, austeridad y manejo eficiente de recursos. Siempre visualiza para donde vas, comparte la visión y sé ejemplo para tu equipo, clientes y proveedores.
Solo trabajando con pasión estratégica, lograrás esa ventaja competitiva, ese plus que te va a convertir en un servicio único, sostenible, preferencial, dinámico, rentable, flexible y capaz de ajustarse a los cambios del entorno.
Mide tus resultados. Definitivamente lo que no se mide, no se administra y no se mejora, así que trabaja con tus indicadores y ves tomando a tiempo las decisiones que sean necesarias. Sé organizado desde el principio, apóyate en un buen contador y mantén tus informes contables claros y detallados. Ellos son los que te van a guiar en la toma de decisiones.
Emprender puede ser posible si te apasiona lo que haces. Si bien es cierto que este factor es fundamental para sobrepasar todas las presiones que significa un nuevo negocio, iniciarlo de manera organizada, detallada y estratégica, incrementa tus posibilidades de sostenerlo y crecer en el tiempo.
Emprender puede ser posible si te apasiona lo que haces. Si bien es cierto que este factor es fundamental para sobrepasar todas las presiones que significa un nuevo negocio, iniciarlo de manera organizada, detallada y estratégica, incrementa tus posibilidades de sostenerlo y crecer en el tiempo.
Joceline Azar Nigrinis
Gerente general HAGO SAS
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